Una de las conductoras más queridas y aclamadas de todos los
tiempos tras su salida de venga la alegría se ha propuesto dedicarse más a su
espiritualidad y a su familia, se le ha visto en cuantiosos viajes por el
mundo.
Al parecer a ella ya no le preocupa nada, ni la enfermedad
terminal de su esposo, pues se le ha visto en varios viajes con sus hijos donde
sonríe disfruta y vive su vida al máximo.
Las redes sociales ardieron cuando se le vio en un lugar
paradisiaco en pleno jacuzzi tomando una margarita cuando empezó a ver que su
alberca que se llenaba de 11 hombres guapos, ella quedó desconcertada al ver
dicha situación, pero se dejó llevar por la marea y empezó a consentirse.
Luego empezaron a tomarse fotos y ella solo se dejó posar por los
rubios que la acompañaban. Las redes ardieron porque pasó de ser la sencilla y
carismática Íngrid, a ser la fogosa coronado bendita entre los hombres.
Como mamá ha cumplido al pie de la letra sus labores llegando a
necesitar de una escapada a la intimidad y a la relajación.
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